LA TARDE CAE MANSA SOBRE EL CAMPO, EL SOL RECORTA EL MONTE Y TU PERFIL, LAS SOMBRAS SE ADELANTAN A LA NOCHE, LOS PAJAROS SE ELEVAN AL CENIT. EL ORDEN DE LAS CASAS HUELE A VIDA, LOS NIÑOS DEJAN TODO POR COMER, LA CENA PREPARADA ESTA SERVIDA, VUELVE EL HOMBRE DEL TRABAJO A SU QUERER. ANECDOTAS DEL DIA SE FLOREAN, HUELE EL AIRE A VIDA FAMILIAR, Y LOS LOBOS AULLANDOLE A LA NOCHE, LIMITAN ESTA INTIMA POSTAL. EL SUEÑO SE APODERA DE LAS ALMAS, Y SE IMPONE EL IR A DESCANSAR, LA LUNA ALLA EN LO ALTO BRILLA JOVEN, HA PASADO EN LA ALDEA UN DIA MAS. MARCELO PABLO RINALDI
Teñidas de oropeles, Sus Paredes de piedra, Con musgo en superficie, E interior de leyenda, Se abren hacía el piso Sus voraces compuertas, Al parecer vomitan Sus tropas y defensas. En el lago espejado, Su contorno florea Una fauna nutrida De peces y de bestias Y entre rimas y besos La corte lo corteja, A ése príncipe sabio Forjando su leyenda. Lo ha defendido antes De amenazas y guerras, En él se han festejado Tantas glorias eternas Que se diría vive En su interior la esencia De un a lma iluminada De vital trascendencia En sintonía sabía Con su príncipe y ésa Princesa acariciarte Que de noche florea Su perfume exquisito Por jardines y pérgolas Entre lunas menguantes , Y crecientes, y llenas. Hermosa sintonía, Seductora princesa Y el otrora señor, Príncipe de leyenda, Conforman sabio trío Con el alma que llena Los espacios vitales De luz y madreselvas. Los soldados relucen Armaduras perfectas, No parecen usadas En antiguas contiendas. Sus armas son letales Y decir parecieran...
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